¿Se puede vivir en un apartamento turístico?

Un apartamento turístico es un establecimiento o una vivienda que se destina a prestar el servicio como alojamiento para turistas y que debe cumplir una serie de requisitos para que se ajusten a la legalidad. No debe confundirse con el concepto de vivienda vacacional o de uso turístico, ya que, aunque mucha gente utiliza estos términos de manera intercambiable, no se trata de lo mismo.
Requisitos y permisos para legalizar apartamentos turísticos
Como hemos dicho antes, los apartamentos turísticos deben cumplir con una serie de requisitos para ajustarse a la legalidad. Además, estos requisitos pueden variar dentro de nuestro propio país dependiendo de la comunidad autónoma en la que se ubiquen los apartamentos turísticos en cuestión. Entre estas condiciones y permisos encontramos las siguientes.
Estos apartamentos deben estar compuestos por un conjunto de unidades de alojamiento, es decir, de un complejo profesionalizado que debe contar con un área de recepción y tener servicios diarios, como la limpieza o el cambio de sábanas. Están constituidos como una empresa y no tiene carácter residencial, por lo que se incluye como una actividad comercial que se inscribe en la misma categoría que los hoteles, las pensiones o los hostales.
No sólo se consideran apartamentos dentro de esta categoría, sino que pueden ser villas, chalés, bungalows, entre otros, pero recuerda que, como hemos comentado, deben formar parte de un conjunto profesionalizado dedicado a la recepción y atención de turistas.
Estos espacios deben estar preparados para ser ocupados de manera inmediata. Además, deben contar con todo el mobiliario y las instalaciones necesarias para poder habitarlo. Por ejemplo, debe haber lugar para conservar alimentos y refrigeración, debe tener un lugar para la elaboración de comidas, es decir, una cocina y un lugar donde poder consumir alimentos y bebidas dentro de cada apartamento.
Estos, al igual que los hoteles, se clasifican según la jerarquía, pero en este caso no es por estrellas, sino por llaves. Así, dependiendo de si el apartamento turístico tiene 1 o 4 llaves puede pertenecer a la parte más alta o más baja de la jerarquía.
En cuanto a la duración de la estancia, dependiendo de las comunidades autónomas, pueden superar los 30 días. Ya que, en algunas de ellas, se permite superar los 3 meses mientras que otras no establecen límites.
Para legalizar estos apartamentos turísticos, se deben cumplir con otros permisos, como por ejemplo, que los lugares de alojamiento tengan una cédula de habitabilidad o posean una licencia de ocupación. Además, el propietario debe aportar una declaración responsable e inscribir la vivienda en el registro de apartamentos turísticos e incluir el código que se te asigne para aplicar promociones.
Estos trámites, por norma general, suelen ser gratuitos. Sin embargo, en algunas comunidades, como en el caso de Galicia, la presentación de la declaración responsable está sujeta al pago de una tasa.
Para finalizar con este apartado, debemos decir que puede haber variaciones en cuanto a los requisitos que deben cumplir las viviendas dedicadas como apartamentos turísticos. Por ejemplo, en Andalucía se obliga a instalar sistemas de refrigeración en cada una de las habitaciones y Madrid, por su parte, plantea en un futuro pedir un certificado de idoneidad para la vivienda y la contratación de un seguro de responsabilidad civil. Si tienes dudas respecto a estos temas, no dudes en contactar con nosotros, en arkespai.com.
¿Se puede vivir en un apartamento turístico?
Como hemos visto, no existe una normativa realmente clara en torno a este tema, por lo que esto queda en manos de las comunidades autónomas. En algunos casos, el límite para habitar un apartamento turístico no puede rebasar los 30 días. Sin embargo, en otras comunidades, se permite habitar la vivienda hasta 3 meses y, en otras, no tienen una legislación clara al respecto, por lo que, posiblemente, en estas, se pueda vivir en un apartamento turístico.
Diferencia entre vivienda vacacional y vivienda de uso turístico

Te hemos mostrado en el apartado anterior las características que ha de cumplir un apartamento turístico y ahora te mostraremos las de las viviendas vacacionales y las de uso turístico y te enseñaremos las diferencias que existen entre estas dos últimas.
¿Qué es una vivienda vacacional?
Una vivienda vacacional es aquella en la que se presta únicamente el servicio de alojamiento mediante precio, de forma habitual y profesional y se alquila cada vez toda la vivienda de forma íntegra. Por lo tanto, se debe alquilar en su conjunto y generalmente se trata de casas y chalets de gran capacidad. Normalmente pertenece a un particular que puede hacer uso de la misma durante las épocas del año en que no esté alquilada.
Estas pueden tener una capacidad máxima de unas 14 plazas en 7 habitaciones, lo que quiere decir que puede haber dos personas, como mucho, en cada habitación. Deberá tener una placa normalizada en la entrada que indique ante qué tipo de vivienda vacacional nos encontramos.
Debe tener agua potable, caliente y fría, energía eléctrica, un sistema de evacuación de aguas residuales, un servicio público de recogida de basuras, calefacción, un botiquín de primeros auxilios, un extintor por planta, teléfono y acceso señalizado a la propia vivienda.
En cuanto a las estancias, la vivienda debe tener dormitorios de 6 metros cuadrados como mínimo que estén completamente amueblados, con cama limpia y en perfectas condiciones, mesillas de noche, una silla por persona, armario ropero con perchas e interruptores para apagar o encender la luz al lado de la cama.
Debe tener un cuarto de baño completamente equipado y que proporcione la ventilación adecuada, un salón que se adecue a la capacidad mínima de la vivienda vacacional. Debe haber cocina, y esta debe estar bien ventilada y equipada con fregadero, horno, cocina con dos fuegos como mínimo, frigorífico y despensa o armarios con cubiertos, vajilla, lavadora, plancha etc.
¿Qué es una vivienda de uso turístico?
Las viviendas de uso turístico son inmuebles residenciales que suelen ser alquiladas por parte de los propietarios de manera habitual. Sin embargo, su uso no es estrictamente comercial, sino que los propietarios también pueden decidir habitar ese inmueble durante algunas temporadas al año, si lo desean.
Estas deben ajustarse a los estatutos de la comunidad de propietarios del edificio y a la ordenación municipal de usos de la vivienda en la localidad en la que se ubique. Esto se debe a que no están ubicadas, como los apartamentos turísticos, en complejos residenciales. Sino que comparten espacio con vecinos que son totalmente independientes y ajenos al negocio.
Estas viviendas, al igual que las anteriores, están clasificadas según la jerarquía de alojamiento, y esta clasificación se realiza por llaves, que son equivalentes a las estrellas de un hotel, pero de 1 a 4 llaves, dependiendo del nivel de servicios y de comodidad.
El servicio en sí es muy parecido al de las viviendas vacacionales, sin embargo, la diferencia surge en que, mientras las de uso turístico suelen ser pisos y apartamentos ubicados dentro de un bloque de pisos, las otras suelen ser casas y chalets de gran capacidad, ubicados en entornos un poco más apartados.













































































